Con una nutrida agenda de actividades virtuales orientadas a estudiantes, académicos y docentes, la carrera de Trabajo Social de Sede Viña del Mar efectuó una semana de consolidación de aprendizajes y pausa académica.

La iniciativa incluyó talleres de cuidados ergonómicos y psicosociales en tiempos de pandemia, de alimentación saludable, autocuidado y telestudio, un encuentro de diálogo para docentes y académicos de la carrera, además de un “Espacio para el reencuentro” que incluyó la obra de teatro “Una locura de pandemia” del colectivo teatral “La Menjunje Lunática”, risoterapia y se lanzó la campaña “Abre tu cámara”, con el lema “distancia física no es distancia social”.

Alberto Blest, Director de la Carrera de Trabajo Social de Campus Los Castaños, comentó que esta semana surgió a raíz de una primera idea del estudiantado en relación con encontrarse estudiantes y docentes en un espacio diferente al académico, realizándose finalmente con la colaboración de la academia, la Escuela, el Centro de Estudiantes, delegados de curso, además de los aportes de la Directora de Carrera de Nutrición y Dietética, Gabriela Lizana, el Director de Carrera de Kinesiología, Rodrigo Beltrán y la Corporación Humanna Consultores.

“Este programa de actividades se llevó a cabo de manera exitosa, tanto por sus resultados, la cobertura y participación de estudiantes y docentes, el impacto y la relevancia para consolidar comunidad de una carrera organizada, realizar una pausa académica sin necesidad de suspender el vínculo, reconociendo la situación país actual de pandemia sanitaria, económica y social”, dijo el directivo. 

Para Silvana Navarrete, representante de los estudiantes de Trabajo Social, “la semana de consolidación generó un espacio de encuentro distinto, no de cátedras y trabajo. Las actividades entregaron opciones valiosas de autocuidado, lo que permite sobrellevar de mejor manera la situación socio emocional producto del confinamiento y distanciamiento físico. Se agradece la generación de este espacio y resalto la participación de la comunidad de Trabajo Social, logrando una participación activa, de integración espontánea, que incluso incorporó a las familias”.

Finalmente, Yerko Toledo, académico de Trabajo Social, expresó que “este espacio contribuyó a generar diálogos diversos entre estudiantes, docentes y académicos, que nos acercan a las diversas realidades que cada uno se encuentra viviendo, posibilitando la conexión con emociones, sentimientos, reflexiones y propuestas. También, nos invita a pensar sobre los desafíos que el escenario actual genera, tanto como Universidad y Escuela de Trabajo Social, tomando en consideración, la desigualdad socioeconómica, que cada vez se hace más latente; lo que se constituye en un desafío ético-político, del cual tenemos que ocuparnos”.