El Director del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Gonzalo Rivas, abordó los desafíos de la Inteligencia Artificial (IA) para las instituciones de educación superior, en una charla magistral dictada en la Inauguración del Año Académico de Universidad de Las Américas.

Rivas destacó que la exponencial evolución de esta tecnología tendrá enormes implicancias para el futuro de las universidades en ámbitos que van desde la investigación que se realiza en sus laboratorios, hasta los programas de continuidad educacional que permitirán a los profesionales actualizar sus competencias. “La IA tiene aplicaciones transversales en prácticamente todos los ámbitos de nuestra vida (…) la agilidad con la que las universidades respondan frente a estos desafíos será crucial”, señaló.

En tanto, Pilar Romaguera, Rectora de Universidad de Las Américas, comentó que durante abril se realizaron un ciclo de charlas magistrales y conversatorios para docentes de nuestra casa de estudios, con el propósito de profundizar la comprensión de la IA y su impacto en diversas especialidades. “Este ciclo nos ha permitido vislumbrar el tremendo potencial de la IA para transformar las disciplinas y profesiones en las que nuestros estudiantes se desempeñarán”, apuntó la Rectora.

Uno de los asistentes a esta última charla magistral, fue el Subsecretario de Educación Superior, Víctor Orellana, quien valoró “el esfuerzo de las universidades por abrazar nuevas tendencias tecnológicas y hacer de la Inteligencia Artificial una oportunidad, la que es una tecnología con múltiples potencialidades”.

IA en universidades

Gonzalo Rivas, quien se desempeña como jefe de la División de Competitividad, Tecnología e Innovación del BID, expuso que la Inteligencia Artificial es un tema de larga data en el ecosistema científico, pero que en los últimos años alcanzó una revolución con el avance de las herramientas generativas, apalancado por factores como la extraordinaria evolución en la capacidad de cómputo, el diseño de nuevos sensores capaces de captar datos y la inversión en proyectos para impulsar nuevos desarrollos.

El economista subrayó que las universidades tendrán un rol fundamental en este proceso, y que en países como Estados Unidos ya se observa, a través de alianzas entre las grandes empresas tecnológicas que lideran el mercado y casas de estudio que son referencia en la generación del conocimiento.

Su visión es que las universidades tienen cuatro ejes de potenciales beneficios: en la administración, el aprendizaje, la instrucción y la investigación. De estos, el campo científico será el que tendrá los mayores beneficios, con aplicaciones que van desde ayudar a los investigadores a escribir sus papers de forma más ágil, hasta procesos de estudio en laboratorio que antes tomaban años a concretarlos solo en horas.

“Todo esto va asociado al uso de una capacidad de cómputo brutal. Las universidades de élite y las grandes compañías del mundo son las que están liderando este juego, en función de sus intereses mutuos. El riesgo es que esto se concentre en muy pocos jugadores, generando sesgos e inclusión entre los países e incluso al interior de estos. Entonces, las universidades deber dar herramientas a las personas para aprender a usar estas tecnologías, pero siendo cautos de cómo se aplican”, advirtió Rivas.

Ciclo para nuevos desafíos

La charla magistral del economista del BID fue el cierre de un ciclo de jornadas que se realizaron durante todo el mes de abril en Universidad de Las Américas para reflexionar sobre las oportunidades y desafíos de la IA en múltiples campos del conocimiento y en la formación de nuevos profesionales.

La Rectora Pilar Romaguera remarcó que una de las principales conclusiones que la comunidad universitaria extrae de este proceso de reflexión, que se ha desarrollado en todas sus sedes y facultades,  es que esta evolución tecnológica, que hoy es liderada por la industria, requiere de un mayor protagonismo de la academia.

Esto, con el propósito de “poner el conocimiento y tecnología al servicio de la sociedad”. “Como universidad, tenemos la responsabilidad de preparar a nuestros estudiantes para ser no solo usuarios, sino también pensadores críticos y responsables de estas tecnologías en sus respectivos cambios profesionales”, concluyó la máxima autoridad de UDLA.