Osvaldo Artaza, Decano de la Facultad de Salud y Ciencias Sociales, participó como representante de la Corporación de Universidades Privadas (CUP) en la sesión de la Comisión de Salud del Senado, para contribuir en el proyecto de ley que define a los establecimientos de salud como asistenciales-docentes y señala las características de la relación entre la red de salud y las instituciones de educación superior. 

El proyecto de ley regulariza los Campos Clínicos de las instituciones de educación superior (IES) con el principio de mantener la articulación de la oferta de prestaciones de salud con las necesidades de formación de profesionales y técnicos; el respeto por los derechos de las personas usuarias; el resguardo de la calidad y mejora de la integridad del sistema, entre otros.

Además, busca promover una acción sistemática, coordinada y articulada entre el quehacer de las IES y los requerimientos sanitarios del país y las regiones, potenciando el factor territorial y reconociendo como uno de sus principios, la interculturalidad.

Entre los criterios prioritarios de asignación a Campos Clínicos, el proyecto considera la ubicación geográfica, naturaleza estatal, años de acreditación, adscripción a Gratuidad, porcentaje de participación anual en Plan Nacional de Formación Especialistas Minsal y contar con programas culturales, de desarrollo, educación continua, innovación o investigación.

Artaza, en representación de la CUP, introdujo afirmando que “es muy importante que se regule las relaciones entre las instituciones de salud y las de educación superior. Creo que hemos estado en un espacio de falta de regulación que no ha sido positivo para nadie. Lo segundo, creo que el tema de Campos Clínicos tiene que tener prioridad en los estudiantes no en las instituciones, ya sean públicas o privadas, y deben tener las mismas oportunidades”.

Además, Artaza aseguró que “es importante que todas las universidades hagan fuertes inversiones y estrategias para desarrollar metodologías complementarias. Hoy en el mundo el 80% de las prácticas profesionales se hacen con metodologías distintas a los campos clínicos convencionales, a través de Educación Clínica Avanzada, con resultados de aprendizaje óptimos”. 

El Decano concluyó que “para que todos los estudiantes puedan tener acceso a la importante experiencia de un centro clínico convencional, la ley debe avanzar a que esté disponible sin ningún tipo de discriminación y privilegio, a todas las universidades acreditadas y certificadas por el Estado”.

Por otro lado, la CUP redactó una minuta de análisis preliminar del proyecto, que propone que “las instituciones formadoras deben desarrollar nuevas metodologías que aseguren resultados de aprendizaje complementarias o sustitutivas del campo clínico convencional”.

Agregando que “es esencial que el campo clínico existente esté disponible a todas las instituciones formadoras sin privilegio, ni exclusividad, ni discriminación alguna, privilegiando vinculaciones estratégicas de mediano y largo plazo con enfoque de red asistencial según las realidades territoriales”.