Más de treinta familias y una quincena de profesionales pertenecientes a centros de autismo de la Región de Valparaíso fueron los beneficiados del proyecto de Vinculación con el Medio “Abordaje integral para personas autistas: terapias mediadas por padres y tratamiento farmacológico para comorbilidades”, desarrollado por las carreras de Fonoaudiología y Kinesiología de Sede Viña del Mar.

La iniciativa, que se adjudicó Fondos de Vinculación con el Medio UDLA, consideró la realización de tres jornadas de teóricos- prácticas en las que participaron integrantes del Centro de Autismo Popular de Llay-Llay, Fundación Influye y de la Corporación Autismo Viña del Mar, a través de las cuales se instruyeron sobre del tratamiento farmacológico asociado a comorbilidades comunes en la condición de espectro autista y estrategias terapéuticas para la intervención parental, con el propósito de disponer de herramientas para acompañar a las personas autistas y mejorar su calidad de vida.

Las charlas y talleres estuvieron a cargo de la Dra. Constanza Román, psiquiatra del Hospital El Salvador de Valparaíso, y de las fonoaudiólogas Natalia Rojas y Nicole Vargas, abordándose temáticas como los objetivos de la terapia farmacológica y medicamentos más comunes, el rol de la familia en las acciones terapéuticas con foco en niños y adolescentes autistas, intervención parental en el desarrollo de habilidades comunicativas, además de la definición de tareas para que las familias pudieran aplicarlas en casa.

El proyecto también consideró la capacitación en las mismas temáticas a más 40 estudiantes de las carreras de Fonoaudiología y Kinesiología, quienes desde las acciones propias de cada disciplina aplicaron lo aprendido en un taller junto a las familias y profesionales de los centros participantes, a quienes entregaron dípticos e informativos que elaboraron junto a sus académicos sobre distintos aspectos del autismo, entre ellos, manejo de rutina y actividad física, estimulación del desarrollo sensoriomotor, cuidado, juegos, interacción social, aprendizaje y comunicación.

Finalmente, el proyecto incluyó una actividad práctica que se efectuó en el Centro de Entrenamiento en Simulación en Salud (Cess) de Campus Los Castaños, donde las familias y profesionales participaron en ejercicios de simulación con actores capacitados y con material didáctico acorde para practicar las estrategias y herramientas a prendidas durante la ejecución del proyecto.

Camilo Vargas, Director de Carrera de Fonoaudiología Sede Viña del Mar y responsable del proyecto que desarrolló junto a la académica de Kinesiología, Mary Laura Valverde, comentó que “evaluamos de manera positiva esta iniciativa, pues se cumplieron los objetivos de compartir conocimiento y estrategias de intervención útiles y específicas para cuidadores y profesionales, además de la posibilidad de que nuestros estudiantes se vinculen con familias de niñas, niños y jóvenes autistas”.

Agregó que “la recepción de las familias fue mejor de lo esperado, a pesar de lo ocupados que pueden ser sus días, muchos se organizaron para asistir a ambas jornadas. Las actividades prácticas y de simulación las sintieron como un espacio seguro, donde cada participante empatizó con la realidad del otro y se atrevieron a mostrar qué herramientas usan para fomentar la comunicación con sus hijos. Superaron miedos e inseguridades para realizar las actividades simuladas y los observadores demostraron su orgullo por aquel padre y madre. Hubo momentos muy emotivos que, sin duda, dejaron una huella en cada persona que estaba en la sala”.

Los participantes expresaron su agradecimiento por la oportunidad de adquirir nuevos conocimientos y herramientas que les permitirán brindar una atención más integral y especializada a las personas con autismo. Asimismo, la experiencia reforzó el compromiso de UDLA con la vinculación con el medio y su labor en la generación de proyectos que impacten positivamente en la sociedad.

Para José Prieto, de Llay-Llay, “esta actividad fue excelente, aprendí nuevas experiencias para tratar a nuestra nieta que tiene autismo. Fue todo muy profesional, nos hicieron sentir acogidos y apoyados. Espero sigan organizando jornadas como estas pues hay mucha gente que lo necesita para aplicar lo aprendido con sus niños”, mientras que Rony y Carolina, padres de Sebastián de 6 años, comentaron que “nuestro hijo es TEA no hablante y uno a veces desconoce muchos temas, por lo que esta jornada ha sido muy buena para aprender y avanzar como familia”.

Roberto Arenas, fonoaudiólogo y encargado del Centro de Autismo Popular de Llay-Llay, dijo que “es un placer estar acá formándonos en un aspecto tan desconocido desde el ámbito terapéutico, que es el tratamiento farmacológico para comorbilidades del espectro autista. La expositora fue muy empática con los profesionales y las familias, y fue significativo que nos contara su historia de vida como persona autista y las herramientas que nos entregó”.

Francisca Leiva, estudiante de Fonoaudiología, expresó que las actividades del proyecto “fueron instancias muy enriquecedoras para mi formación profesional, ya que se mostraron estrategias de intervención que en el futuro pueden ser muy útiles de trabajar con niños y jóvenes. Compartir con los padres, escuchar sus experiencias, las estrategias que aplican con sus hijos y que manifiesten lo mucho que los han ayudado los profesionales dedicados al área de autismo fue una motivación muy grande para el día de mañana ejercer la carrera y ser un apoyo para miles de familias, niños y jóvenes que necesitan de nuestro quehacer”.

Para Franco Salgado, alumno de Kinesiología, “haber participado en este proyecto me permitió interactuar directamente con las familias y conversar con ellas sobre sus experiencias y expectativas, todo esto en un ambiente de respeto y empatía que me aporta experiencia en la formación como kinesiólogo. Destaco la invitación que hace la Universidad a las familias, la asistencia y el interés que mostraron en participar en cada una las actividades”.