Estas en: Sin categoría La calidad se construye en comunidad
Publicado el 24 de octubre de 2025
Hablar de acreditación, en nuestra Facultad, es hablar de personas. Detrás de cada logro hay equipos que han trabajado con rigor, reflexión y una convicción que, al mirarla desde dentro, emociona. Alcanzar cinco años de acreditación institucional y contar con el 100% de nuestras carreras pedagógicas acreditadas no fue fruto del azar, sino el resultado de un trabajo sostenido que ha unido a las carreras, sus directivos y académicos en torno a una meta compartida: transformar vidas y ampliar oportunidades mediante un aprendizaje inclusivo, con prácticas innovadoras y efectivas.
Este proceso se desarrolla en un contexto nacional que también vive tensiones. Chile cuenta con un sistema de aseguramiento de la calidad sólido y exigente, que ha elevado los estándares de la formación inicial docente. Pero ese mismo marco deja a veces poco espacio para la innovación y la flexibilidad, condiciones esenciales para preparar a los profesores que el siglo XXI necesita. Nuestro desafío ha sido demostrar que calidad e innovación pueden avanzar juntas, cuando hay propósito, coherencia y trabajo en equipo.
En esa línea, impulsamos el Proyecto Institucional de Innovación (PRIC), que nos convoca a actualizar nuestros sellos y responder a las nuevas demandas sociales y profesionales. Revisar los planes formativos desde la evidencia, fortalecer la articulación entre docencia y práctica, e incorporar nuevos programas —como las prosecuciones de estudios, que contribuirán a enfrentar el déficit de docentes en el país— son pasos concretos en ese camino. Actualmente, dos carreras se encuentran en pleno proceso de acreditación y las otras dos se preparan activamente para iniciar sus autoevaluaciones, consolidando un ciclo de mejora continua que involucra a toda la comunidad académica y formativa.
Nuestro sello es claro: un modelo formativo basado en la práctica, una formación apoyada en la transformación digital, el compromiso y la responsabilidad social, y currículos flexibles y articulados que fortalecen las trayectorias de aprendizaje. Estos pilares nos distinguen y nos proyectan como una Facultad que se atreve a repensar la formación docente desde la evidencia, la innovación y la responsabilidad pública.
Acreditar no es cumplir, es avanzar. Avanzar con sentido crítico, con pensamiento académico y con la certeza de que la calidad no se impone: se construye, se investiga, se evalúa y se comparte. Hoy más que nunca, nuestra tarea es sostener la mejora, abrir espacios a la innovación y seguir demostrando que una Facultad comprometida puede liderar, aprender y transformar la educación del país.
María Jesús Honorato Errázuriz Decana, Facultad de Educación – Universidad de Las Américas