La Rectora participó en el seminario “Educación superior, transformación y equidad”, organizado por la Universidad Santo Tomás y que se transmitió por EmolTV, que contó con la exposición del especialista internacional, Jamil Salmi, y en el que a continuación se realizó un conversatorio que tuvo como panelistas a diversos expertos.

Participaron en la actividad Harald Beyer, profesor de la Escuela de Gobierno de la Pontificia Universidad Católica de Chile; José Joaquín Brunner, profesor emérito de la Universidad Diego Portales e investigador del Instituto de Alta Investigación de la Universidad de Tarapacá; Jamil Salmi, especialista internacional en educación superior; y la Rectora de nuestra Universidad, Pilar Romaguera. Moderó José Julio León, Vicerrector de Desarrollo y Aseguramiento de la Calidad de la Universidad Santo Tomás.

Jamil Salmi expuso sobre el libro que editó “Transforming Lives at the Institutional Level: Equity Promotion Initiatives”, obra que documenta iniciativas innovadoras de promoción de la equidad en educación superior a nivel institucional, en todo el mundo.

El expositor planteó que las iniciativas recopiladas le permitieron concluir la existencia de grandes diferencias entre países. Explicó que hay lugares donde la equidad es una prioridad y otros donde les es indiferente. “Si no podemos observar las desigualdades no se pueden implementar políticas. Habría que reconocer la complementariedad entre políticas nacionales y a nivel de instituciones, especialmente en términos de los incentivos para ayudar a las instituciones. Habría que reconocer, también, que existe la opinión de que el tema de equidad es un problema de recursos y que se deben eliminar las barreras financieras;  pero hay otras barreras tan importantes como esa, como son el capital cultural en el hogar, la preparación académica y la motivación, entre otros. Entonces, hay que combinar todas estas medidas, y es importante monitorear para pesquisar si hay una mala implementación para poder corregir y hacer los ajustes necesarios”, indicó Salmi.

La Rectora, Pilar Romaguera, se refirió al caso de Chile y explicó que nuestro país presenta una situación particular en cuanto a acceso a la educación superior: “Chile cuenta con una oferta amplia y diversa de educación superior que determina que un alto porcentaje de quienes postulan ingresen al sistema. A pesar de ello, las tasas de cobertura son distintas entre diferentes segmentos de la población. Y hoy, incluso con gratuidad, se observa una diferencia de 20 puntos porcentuales, aproximadamente, entre el acceso del quinto quintil (los que tienen más recursos) y el acceso del primer quintil (aquellos con menos recursos)”,  de esta forma, la autoridad señaló que los problemas se asocian más a permanencia y titulación efectiva de los estudiantes.

La Rectora agregó que en el caso de Universidad de Las Américas se ha implementado un amplio sistema de apoyo, que incluye medidas en el ámbito del bienestar y la salud mental, y que busca apuntalar la permanencia de los estudiantes. “Hemos observado la emergente necesidad de psicólogos y trabajadores sociales que acompañen la docencia en nuestros campus, lo que nos permite ofrecer apoyos más allá de los curriculares, lo que condiciona mucho el éxito de los estudiantes”.

Harald Beyer, profesor de la Escuela de Gobierno de la Pontificia Universidad Católica de Chile, compartió la misma opinión: “Nosotros somos, por lejos, el país en Latinoamérica que tiene mayor cobertura para los deciles con menores ingresos, 20 puntos por sobre el país que nos sigue. Incluso, la participación de los quintiles más bajos es más alta (primer y segundo quintil) que la que existe en Europa en educación superior. Eso impone ciertos desafíos, porque estamos logrando más acceso, pero estamos teniendo dificultades. Si bien no tenemos datos confiables de deserción y de titulación oportuna, todo indica que estamos estancados en esos indicadores, a pesar de todos los esfuerzos”.

En tanto, José Joaquín Brunner, profesor emérito de la Universidad Diego Portales, sostuvo que “la dificultad de las cosas también está dada ahora porque no sabemos si efectivamente nuestro sistema de educación superior está ofreciendo una experiencia transformadora a toda la gran diversidad de jóvenes que están ingresando a la educación superior, y ello abarca desde las universidades más selectivas, hasta los CFT estatales recientemente creados”.

Los expositores coincidieron en la necesidad de contar con un sistema más flexible e integral de apoyo a los estudiantes, tanto en la forma en que se define el financiamiento, como en el modo en que las instituciones puedan desarrollar sus proyectos de reforzamiento e integración. En este sentido, argumentaron que la normativa se debe adaptar para recoger las tendencias actuales y otorgar más flexibilidad a las instituciones para organizar sus políticas, asegurando para esto el proceso de mejora continua, con indicadores claros, que faciliten y permitan una mejor trayectoria estudiantil.