En un ambiente de alegría, se llevó a cabo el hito de cierre del Programa de Intervención Comunitaria (IC) en el Barrio Templo Votivo de Maipú, marcando el fin de una etapa de intensa colaboración entre la Universidad de Las Américas y la comunidad.

La actividad contó con la presencia del alcalde de la comuna, Tomás Vodanovic, autoridades institucionales, el equipo territorial del Programa en Campus Maipú y socias y socios comunitarios con quienes se estableció un vínculo en el territorio. 

La instancia estuvo marcada por las palabras de los diferentes actores que durante 5 años han participado del trabajo colaborativo en el territorio, y la participación de diversas agrupaciones artístico culturales como Ballet Expresiones, agrupación “De todo un Poco” y el grupo “Flor de Cueca”. 

El alcalde Vodanovic destacó el importante rol que ha jugado UDLA como “un buen vecino” de la comuna, siempre dispuesto a colaborar y aportar al bienestar de los habitantes.

“Desde el primer día, ante diferentes solicitudes durante la pandemia, los operativos para mascotas, o cuando nos ha faltado un espacio, cuando han ofrecido programas para las personas adultas mayores o realizado operativos barriales. Siempre Universidad de Las Américas ha sido una institución a disposición para involucrarse, comprometerse y poder aportar, lo que es finalmente un buen vecino” expresó el alcalde, quien relató parte de la experiencia con la Universidad durante los primeros años de pandemia de Covid-19 en 2020. 

Esta experiencia práctica la valoran los estudiantes, que han podido poner en práctica sus conocimientos y habilidades en un contexto real, conectando con las necesidades y el sentir de la comunidad. María Jorquera, presidenta de la Junta de Vecinos Villa Tupahue, lo resume de la mejor manera: “Fue muy bonito el trabajo de los estudiantes en terreno. Pudimos vernos las caras, estar juntos y abrazarnos. Fue lindo”. 

La colaboración entre UDLA y la comunidad del Barrio Templo Votivo ha dejado una huella profunda en ambos sectores. Los estudiantes han adquirido valiosas experiencias y aprendizajes, mientras que la comunidad ha recibido apoyo, conocimiento y nuevas perspectivas. A pesar de la finalización del Programa IC en su fase 5, las autoridades de la UDLA han reafirmado su compromiso con el Barrio Templo Votivo.

“Esperamos que esto no sea el fin de un ciclo, sino el inicio de una nueva versión, una nueva forma de vincularnos“, señaló el Director (i) del Programa IC, Andrés Santana. 

En esa misma línea, Ana María Jaime, presidenta de la Junta de Vecinos Villa La Favorita, manifestó su deseo: “Les dejo invitados a seguir trayendo estudiantes. Nosotros estamos dispuestos a seguir trabajando con ellos, aunque ahora hay un cierre, pero yo creo que no es un cierre, es una apertura”.

Finalmente, Tamara Valencia, coordinadora de Intervención Comunitaria del Programa IC en Campus Maipú, realizó un balance positivo de los cinco años de trabajo en el barrio. “En estos 5 años de trabajo no solo conocimos la historia del barrio, sino también desarrollamos actividades pedagógicas, sociales, de salud, medioambientales y gubernativas“, señaló.

Además, agregó que el hito de cierre del Programa IC en el Barrio Templo Votivo de Maipú deja un legado de colaboración exitosa entre la Universidad y una comunidad: “La experiencia demuestra que, mediante el trabajo conjunto, es posible un impacto positivo en el bienestar de las personas y el desarrollo de los barrios. Una amistad que nació en pandemia, pero terminó en abrazos”.