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En una nueva versión del Ciclo de Investigación de la Facultad de Ingeniería y Negocios, Marcelo Calderón, Doctor en Física y académico del Instituto de Matemática, Física y Estadística (IMFE), presentó el avance de su estudio denominado “Traversable wormhole for Carroll symmetries”, el cual aborda los agujeros de gusano transitables para simetrías de Carroll, donde desarrolla un análisis detallado del tensor de densidad Energía-Momentum resultante, según lo establecido por las ecuaciones de campo de Einstein de la relatividad general.

“Este es un tema de investigación que en estos momentos y a nivel mundial, en el ámbito de la física teórica, es uno de los temas que está bastante a la vanguardia. En ese sentido, UDLA, la Facultad de Ingeniería y Negocios, y el IMFE están protagonizando ese movimiento que pretende explorar esta temática en particular que es el estudio de ciertos fenómenos que en principio deberían ocurrir en el universo y que tienen que ver con los objetos que son súper misteriosos”, explicó Calderón.

En ese contexto, el académico estudia en particular acerca de los agujeros de gusano, definidos como un portal de corta duración, que dura sólo un breve momento y que une dos agujeros negros en diferentes lugares. Son hipótesis que corresponden a una solución a las ecuaciones de Einstein; sin embargo, no existen pruebas que demuestren que los agujeros de gusano existen.

La motivación de esta investigación es estudiar y describir en detalle las características físicas de un agujero de gusano, en un régimen carrolleano, que significa que estos objetos, que parecieran ser de ciencia ficción, la física lo supera, es decir, cosas que suceden en el universo realmente predominan a la ciencia ficción. Estos objetos, en principio existirían al interior de los agujeros negros, que existen de manera muy numerosa en nuestro universo y galaxia. Entonces, ese es el foco de la investigación, estudiar las características físicas de estos objetos”, explicó el académico.

Asimismo, Calderón comentó que el término agujero de gusano es un nombre que se acuñó en 1957, pero que originalmente e denomina cuerdas unidimensionales geométricas. Sin embargo, las personas prefirieron dejar el nombre agujero de gusano.

Por otro lado, el académico sostuvo otra de las motivaciones para avanzar en su investigación, la cual responde a “brindar o explorar otros focos que probablemente nos permita encontrar algún tipo de materia física que no requiera una característica que transgrede los principios de la física clásica y cuántica”.