La actividad, organizada por la Facultad de Derecho de UDLA, reunió al ministro de Justicia, Luis Cordero; la ministra vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco; y a los presidentes de ambas cámaras del Congreso Nacional, Juan Antonio Coloma y Vlado Mirosevic.

Representantes de los tres poderes del Estado participaron en un encuentro organizado por Universidad de Las Américas para abordar los desafíos del actual proceso constitucional.

La cita convocó al ministro de Justicia, Luis Cordero; la ministra vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco; al presidente del Senado, Juan Antonio Coloma, y al presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, Vlado Mirosevic.

Las autoridades coincidieron en que el país enfrenta una oportunidad de carácter histórico, y expusieron desde sus perspectivas, los desafíos en relación con el proceso de elaboración de una nueva carta magna, a 20 días de las elecciones para designar a los miembros del Consejo Constitucional.

Daniel Montalva, Decano de la Facultad de Derecho de la UDLA, afirmó que Chile necesita “poder cerrar su capítulo constitucional” en esta etapa, y que cualquiera que sea el resultado, éste sea valorado con respeto por parte de todos los sectores políticos y la ciudadanía.

La pregunta constitucional

El encuentro tuvo como propósito, en un contexto académico y en el marco del respeto y amistad cívica, realizar una conversación que permita dialogar sobre los poderes del Estado en el proceso de formación de la Constitución. El ministro de Justicia, Luis Cordero, fue el encargado de dar el vamos a las intervenciones de las autoridades.

El secretario de Estado quiso abordar su conferencia “más como profesor de derecho que como ministro”, repasando el “problema constitucional” que ha enfrentado el país desde el año 2000 a la fecha, como parte de los esfuerzos por modificar la carta fundamental firmada inicialmente en 1980.

En su análisis, el eje central de estos hitos ha evolucionado desde “eliminar el enclave autoritario” hasta la discusión sobre derechos sociales y la redistribución del poder, y en su respuesta es fundamental –como en cada momento de crisis a lo largo de la historia de Chile– el rol de las instituciones. “La pregunta sobre qué subyace al proceso constituyente chileno sigue estando abierta (…). Cada vez que hemos tenido crisis ha sido el encauzamiento institucional lo que le ha dado sentido”.

Por su parte, la ministra vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, destacó que el Poder Judicial ha estado mucho más presente en esta nueva etapa del proceso constitucional chileno, a través de diversas instancias que buscan transmitir temas de interés propio y ciudadano al pleno de la comisión de expertos –que actualmente trabaja en un anteproyecto–, en relación a materias como fuentes del derecho (entre ellos los tratados internacionales), autonomía de los jueces y la separación de poderes, entre otros.

“Clarificar el tema de las fuentes del derecho será una gran ayuda para los jueces y fundamentalmente para las personas. Creo que va muy de la mano con relevar la legitimidad del sistema constitucional tiene que ver con las certidumbres, y cuando las personas a veces tienen una falsa impresión de la realidad (…) eso siempre genera una sensación de lejanía y falta de legitimidad del sistema. Esta es una buena ocasión de resolverlo y esto es una oportunidad de resolverlo. El Poder Judicial espera seguir colaborando en el proceso”.

Una constitución de mínimos

Desde el Poder Legislativo, el presidente del Senado, el senador de la UDI Juan Antonio Coloma, recordó en su intervención que Chile ha tenido diez momentos constitucionales a lo largo de su historia y que han generado tres cartas fundamentales de larga data: la de 1833, la de 1925 y la de 1980.

Para el parlamentario, las constituciones deben reflejar “un cierto acuerdo global para compartir el país” y llamó a que el nuevo texto tenga una mirada de largo plazo, es decir, que “ojalá dure lo más posible”, relevando los casos de países como Estados Unidos e Inglaterra. “(Sus constituciones) tienen pocos principios y duran mucho tiempo, y van construyendo su estructura sobre esos cimientos (…)”.

“Tenemos que hacer el máximo esfuerzo para que los problemas de la democracia se resuelvan con democracia. Estamos en un gran momento para tratar de llegar a un acuerdo sustentable (…) después de tres años durísimos, en parte por la pandemia, en parte por el estallido social y en parte por los desencuentros”, finalizó Coloma, quien llamó a dejar de lado el “cortoplacismo frenético” y los “vaivenes” del termómetro político.

La jornada la cerró el presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, líder del Partido Liberal, Vlado Mirosevic, quien analizó eventos de la historia universal, como la Revolución Francesa, los conflictos civiles del siglo XVII y XVIII en Inglaterra, y la Constitución de Estados Unidos. “Hemos llegado acá producto de muchos esfuerzos de generaciones y generaciones que han permitido que estas ideas hoy sean de sentido común, que no lo han sido en la historia de la humanidad, y que costó mucho conquistarlas”.

Académicos y estudiantes de la casa de estudios, desde sus sedes en Santiago, Viña del Mar y Concepción fueron parte de la jornada, que se llevó a cabo en el Campus Providencia de la UDLA y fue seguido desde sus distintos campus en todo Chile de forma remota.