Adscrita a Gratuidad
Natalia Segura, estudiante de quinto año de la carrera de Derecho, realizó un exitoso intercambio académico de cinco meses en la Universidad Politécnica de Madrid – UPM- gracias a la adjudicación de la Beca de Movilidad Internacional de pregrado  del Banco Santander y al acuerdo vigente que UDLA mantiene con la UPM en Derecho Medioambiental.

Por medio de la gestión de la Subdirección de Relaciones Internacionales y de la Dirección General de Asuntos Estudiantiles de UDLA, esta Beca  brinda la oportunidad a los estudiantes de la institución de estudiar un  semestre en universidades iberoamericanas.

En esta entrevista, la futura abogada de UDLA, quien regresó a Chile en febrero del 2023, nos comenta su experiencia estudiantil en España.

¿Cómo surgió la idea de realizar una pasantía al exterior?

Cuando ingresé a UDLA vi en un diario mural el aviso de la Beca de Movilidad Internacional y pensé que llegado el momento postularía, ya que el proceso se puede realizar desde el tercer año de la carrera y con un promedio de notas superior a 5.5. Siempre tuve el entusiasmo y la inquietud de estudiar fuera de Chile.

¿Cómo te ayudó el programa de intercambio de UDLA para postular a la  Beca Santander?

A través de la  la Dirección de Asuntos Estudiantiles realicé todos los trámites y fue bastante sencillo. Desde que me adjudiqué la beca, estuve en contacto directo con Gabriela Pefaur, Coordinadora Nacional de Asuntos Estudiantiles e Intercambio Estudiantil, quien fue mi guía durante todo el proceso.

Nos reunimos de manera remota porque aún estábamos en plena pandemia, y pudimos coordinar los detalles de mi viaje y las solicitudes que debía realizar para viajar sin problemas.

En mi caso, por ser estudiante de Derecho, debía contar con la autorización de mi Facultad y aceptar la condición de no poder convalidar,  sino únicamente vivir  una experiencia académica para fortalecer mi currículo profesional.  Gabriela estuvo en contacto conmigo desde el primer día y, también, durante mi estadía en España.

Cuéntame sobre tu experiencia estudiando en el extranjero durante estos seis meses

Fue muy intensa en todos los sentidos, porque era un constante aprendizaje de los contenidos y la idiosincrasia del lugar.  El sistema académico universitario en Europa es muy diferente al nuestro y el intercambio estudiantil es algo muy habitual. No es extraño que los estudiantes viajen con frecuencia a estudiar a otras Universidades dentro de su mismo país o en Europa.

En lo personal fue un gran desafío porque fui a estudiar Derecho Ambiental con Ingenieros Ambientales, entonces tuve que estudiar conceptos de ingeniería que no manejaba, además de conocer el Derecho Internacional europeo que cuenta con una supra legislación que es la de la Unión Europea, y también, aprender del Derecho en España que tiene una conformación muy diferente por sus comunidades autónomas, su estructura jurídica y legislativo. ¡Fue un tremendo desafío académico!

¿Sientes que creciste en lo personal?

Absolutamente.  Conocer la realidad de otro lugar, tan lejos de tu país, inevitablemente te hace crecer personalmente; te vuelves más empática y entiendes un poco mejor cómo funciona el mundo.

En mi caso, viviendo en Europa, tuve la oportunidad de viajar por algunos países cercanos a España y el hecho de vivir parte de la historia universal en sus calles, museos, monumentos, genera un cambio interno en la percepción del entorno y de tu realidad.  Estas experiencias también te permiten valorar tus afectos personales, y  lo que realmente le da sentido a tu vida.

¿Con qué aprendizajes te quedas de esta experiencia académica en España?

Creo que viajar y conocer otras realidades es indispensable para volvernos seres más colaborativos.  En Europa observé que la movilidad estudiantil  surge desde el colegio y se realiza hasta en la vida laboral; están acostumbrados a convivir con gente de otras culturas. Eso es clave para el desarrollo personal, social y económico y siento que es un ejemplo que debiésemos replicar en Sudamérica, o al menos, convivir con frecuencia entre nuestros países en instancias como éstas.

¿Qué mensajes les das a otros estudiantes de UDLA que están interesados en realizar un intercambio estudiantil?

Que se motiven a postular para estas experiencias, porque si son vividas de manera consciente, generan un tremendo crecimiento personal y por supuesto, intelectual. Independiente de que no se permita convalidar asignaturas en nuestra carrera de Derecho en Chile, los conocimientos adquiridos son de otro nivel. A mí me ha ayudado a tener conversaciones con profesionales de mucho prestigio sobre lo aprendido en Europa y a atreverme a buscar oportunidades laborales de otro nivel.

Si estás interesada o interesado en realizar un semestre de intercambio en el extranjero, también lo puedes gestionar con tus propios recursos, o bien con las becas que se ofrecen por medio de UDLA. Para más información puedes escribir a la Subdirección de Relaciones Internacionales de UDLA, a María Gloria Pichard, [email protected]