Para la Facultad de Salud y Ciencias Sociales, el año 2022 ha sido intenso, fructífero y lleno de desafíos que nos ha permitido crecer, mejorar y proyectarnos como comunidad académica. Una vez completado el proceso de diseño del plan estratégico de la universidad, nos pusimos a trabajar participativamente en la actualización de nuestro plan de desarrollo, a fin de que este, junto a estar alineado al de la universidad, diera cuenta de nuestros sellos distintivos y de nuestros proyectos y aspiraciones de futuro.

En paralelo a esta tarea, nos abocamos a cooperar al proceso de acreditación de nuestra institución, junto a vivir intensamente la certificación de importantes carreras de la facultad. Es así como el año 2022 será recordado por la exitosa certificación de Enfermería, TENS, Terapia Ocupacional y Kinesiología por 6 años y de las escuelas de Nutrición y Dietética y de Fonoaudiología por 5 años. Recientemente acaba de culminar un proceso exitoso de certificación de las carreras de Psicología y Trabajo Social…

Difícil es poder llevar a las palabras el esfuerzo de tantas y tantos en este ámbito. Sin duda el 2022 estará marcado y recordado por siempre como el año de la calidad y de la reflexión sobre nuestro futuro. De esta tensión, ha surgido aprendizaje y equipos más sólidos. Queda la convicción del trabajo bien hecho y la voluntad de seguir progresando.

Conscientes de los desafíos de sostenibilidad de la Universidad, nuestra facultad desarrolló numerosas posibilidades a través de nuevas modalidades en el pregrado y en fortalecimiento del postgrado. Destacable es la apertura de una nueva carrera -Obstetricia- que debutará el 2023. Junto a ello, nuestra facultad ha seguido creciendo en investigación y mejorando en Vinculación con el Medio. Como nunca nuestra facultad ha estado presente en múltiples formas (seminarios, foros, actividades de VcM) en la coyuntura nacional, y como en otros años hemos seguido liderando en presencia en los medios de comunicación.

Estamos orgullosos de la mejora en distintos indicadores, tales como credenciales de nuestros académicos, número de publicaciones, mejoras en retención y empleabilidad, pero por sobre todo contentos con la retroalimentación que nos dan nuestros estudiantes, que es el corazón de lo que hacemos, lo que nos da sentido y fuerza para continuar mejorando.