Si usted pregunta en ChatGPT cuántos trabajos desaparecerán con la Inteligencia Artificial (IA), la respuesta que recibe es: “No te preocupes, la Inteligencia Artificial no está aquí para quitarnos trabajos, sino para hacernos la vida más fácil. Claro, es posible que algunos trabajos cambien o evolucionen, pero también se crearán nuevas oportunidades”.

Pese al llamado a la calma de la IA, la preocupación existe. Y no es algo fortuito ya que la respuesta lleva implícito algo que intuíamos: todo va a cambiar. Y en este mundo nuevo que se asoma, campea la incertidumbre y de qué manera nos veremos afectados. El mundo laboral será otro y por tanto la formación profesional también lo será (…)

Pero, y he aquí la buena noticia: hay características que seguirán siendo necesarias. Y es este el punto donde debemos poner atención. Seguirá siendo necesario capacitarse y formarse a lo largo de la vida. El mundo cambiará, pero también lo haremos nosotros adquiriendo nuevas herramientas, aprendiendo nuevas formas de hacer las cosas, siendo siempre flexibles con adaptarnos y estudiando para mantenernos vigentes.

También se seguirá necesitando profesionales éticos, con una formación y rigor que serán más esenciales que nunca en estos nuevos tiempos que anuncian formas de control y sanción más exigentes y rigurosas.

Y, por último, será necesario el pensamiento crítico que nos permitirá analizar, evaluar e interpretar la nube de información a los que nos veremos expuestos en el futuro. La diferencia la harán los profesionales que comprendan y avancen en estos puntos que estarán al centro del debate en las próximas décadas.

Por esto, evolucionar ya no será opcional y formarnos de manera constante será el requisito mínimo para mantenernos en un mundo laboral que será muy distinto al que conocieron las generaciones precedentes y quien sabe, también mucho más desafiante.