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La Facultad de Medicina Veterinaria y Agronomía realizó la charla “Sistemas de biopurificación para la sustentabilidad agrícola”, dirigida principalmente a estudiantes, académicos y profesionales de la carrera de Agronomía y a personas relacionadas con el mundo de la agricultura.

El expositor encargado de liderar la actividad fue el académico investigador de las Escuela de Agronomía, Sebastián Elgueta, ingeniero agrónomo, Magíster en Ciencias de la Universidad de La Frontera y Doctor en Ciencias Ambientales de la misma casa de estudios y de la Universidad Federico II de Nápoles (Italia).

En la actividad, los participantes conocieron los principios básicos a tener en consideración para implementar un sistema de biopurificación simple, de bajo costo y amigable con el medio ambiente. Todo esto, con el fin de mitigar el impacto de los residuos de plaguicidas, tanto en agua como en suelo.

Para poder entender cómo se utiliza un sistema de biopurificación primero hay que tener claro cuáles son las condiciones climáticas que tengo, entendiendo la transformación y el transporte de los plaguicidas, porque cuando tenemos mucha humedad, lluvia, oscilación térmica o altas temperaturas, hay que saber las condiciones para poder determinar el volumen o tamaño de este sistema de biopurificación”, explicó el académico, quien además identificó que en el sur de Chile se ha desarrollado un avanzado trabajo en este tipo de sistemas.

Elgueta también se refirió al potencial que hay en la zona central de Chile para usar la biopurificación, la cual es considerada “muy importante” ya que es una iniciativa que comienza a perfeccionarse en diversos países con fuerte desarrollo agrícola, principalmente en pequeños y medianos agricultores, aunque también señaló los factores que deben considerarse para que su progreso tenga éxito.

“También es importante saber si nuestras prácticas agrícolas incorporan la buena gestión. No solamente vamos a tratar de instalar este sistema para poder captar los residuos que vayan generándose producto de las prácticas agrícolas, sino que también hay que tener toda una trazabilidad de lo que es el uso y la elección de los plaguicidas para que cumplan con la normativa. Eso quiere decir que estén autorizados por el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) para ser utilizados en un cultivo específico y que se respete la concentración que está definida por la regulación”, aseguró el académico titular de la Escuela de Agronomía.

Finalmente, Elgueta enfocó la última parte de la actividad en entregar algunas recomendaciones que se deben considerar para concretar correctos sistemas de biopurificación, entre las que destacan el manejo integrado de plagas, identificar áreas vulnerables, no mezclar productos ni cargar equipos cerca de fuentes de agua, o usar los plaguicidas de acuerdo al pronóstico del tiempo, entre otros factores.